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Durante la audiencia de imposición de medidas, realizada el viernes pasado, al pastor José Alberto Insfrán Galeano (52), hermano de Miguel Ángel Insfrán Galeano, alias Tío Rico, su abogado defensor Marciano Daniel Lobo Corbeta denunció que su cliente que está procesado en el caso A Ultranza es blanco de amenazas.
Antes de la diligencia, el propio José Insfrán había dicho que tras haberse reunido con el exvicepresidente Hugo Velázquez, que lo invitó para postularse como gobernador de Canindeyú (en las elecciones internas de diciembre de 2022 y las generales de abril 2023), comenzó a recibir ataques de todo tipo y de varios sectores, incluso el político, para que dejara la arena política.
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Si bien la denuncia del abogado Daniel Lobo sobre supuestas amenazas a su cliente José Insfrán pudo ser una estrategia, para que su defendido reciba la medida cautelar de arresto domiciliario y no vaya a un recinto penitenciario, el juzgado hará sus averiguaciones.
En ese sentido, la jueza penal de garantías Especializada en Crimen Organizado, Rosarito Montanía, a través de su AI N° 290 señaló “respecto a la seguridad del imputado, es de público conocimiento que nuestros centros penitenciarios están poblados por grupos criminales de diferentes facciones como ser PCC, Comando Vermelho, clan Rotela y que si bien los extremos alegados por la defensa respecto a supuestas amenazas, no fueron probados, esta Juzgadora, solicitará los informes respectivos, a los organismos de seguridad”.
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Juzgado definirá régimen y sitio según datos que reciba
De acuerdo con lo que agrega la jueza Montanía en su resolución, la información que remitan los organismos de seguridad y el Ministerio de Justicia, servirá para, además de confirmar o descargar las amenazas a Insfrán, para establecer un régimen de reclusión y un centro penitenciario acorde a su condición para que pueda cumplir la medida de prisión preventiva.
Desde el viernes, José Insfrán cumple su medida en la base de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y, una vez definido su reclusorio, será trasladado.
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José Alberto Insfrán, al igual que su hermano Tío Rico, es considerado un procesado de alta peligrosidad por tratarse de un supuesto integrante de una megaestructura narcotraficante y, según la imputación del fiscal Deny Yoon Pak, un importante eslabón dentro del esquema de lavado de activos provenientes del narcotráfico, actividad que lideraría Miguel Ángel.
El pastor se entregó en la Fiscalía de Narcotráfico el jueves último, tras recibir “un mensaje de Dios”.