Transportistas quieren cerrarles las puertas

En marzo deben llegar al país la primera partida de buses con acondicionadores de aire provenientes tanto de Brasil como China, por los cuales el Estado otorgó un subsidio de US$ 30.000 para cada vehículo. Estos nuevos ómnibus tendrán además el servicio de WI-FI incluidos para los usuarios del transporte.

Empresarios del Centro de Empresarios del Transporte del Área Metropolitana (Cetrapam) sostienen la postura de que los vendedores informales, al igual que los niños que solicitan monedas a los pasajeros, no deben subir a estos buses.

Para el presidente de Cetrapam, César Ruiz Díaz, el transporte público no es un espacio para la venta de productos. “Con mucho respeto a los vendedores, pero creo que hay espacios donde se puede realizar la venta y espacios que también se deben respetar como es el transporte. La moción concreta será que no se permita la subida de vendedores ambulantes a los buses”, puntualizó.

Es más, cree que incluso los vendedores no deberían subir a los ómnibus convencionales “porque sus usuarios también se merecen el máximo respeto”. Resaltó que por seguridad y confort de los pasajeros se debe impedir que los comerciantes informales suban a los buses.

“De esto vivimos, hermano”, responde Julián López (38), vendedor de gaseosas y jugos en la zona de las avenidas Madame Lynch y su intersección con la autopista Silvio Pettirossi. Contó que durante el verano vende gaseosas y que luego volverá a la venda de frutas. “De esto vivo, qué voy a hacer. Tengo familia también”, acotó.

Consideró que no todos los que suben a los buses “quieren apretar a la gente” y dijo que muchos, como él, tienen chalecos identificatorios. Al minuto de concretar la breve entrevista, tomó su vieja conservadora y subió a un ómnibus de la Línea 30.

Por su parte, el concejal de Asunción, Daniel Centurión, sostuvo que es factible un trabajo coordinado entre los empresarios del transporte público y los vendedores ambulantes. Recordó en 2013 había impulsado una minuta para prohibir la presencia de comerciantes informales a los buses del transporte, atendiendo el alto índice de asaltos a pasajeros por parte de delincuentes que se hacían pasar por vendedores.

Sin embargo, destacó que mediante la normativa, se dio paso a la identificación de los vendedores callejeros mediante carnets y chalecos. Además se estableció una base de datos de los suscritos y el punto de venta donde habitualmente estos se encuentran.

“Creo que sería interesante trabajar de manera coordinada con los vendedores que están identificados, para que estos sean los que suban a los buses. Ellos dependen de este trabajo para mantener a sus familias”, resaltó el edil.

Para Centurión, formalizar a los vendedores puede convertirse en un primer frente de seguridad, pues ellos serían los primeros en identificar y avisar a la Policía casos de asaltos, entre otros delitos. “Esto sucede en Colombia y está dando buenos resultados”, subrayó el concejal.

Según datos de la Junta Municipal de Asunción, en capital existirían unas 1.800 personas dedicadas a la venta informal.

Para el mes de febrero se espera la llegada de los primeros 100 vehículos 0 kilómetro con acondicionador de aire y Wi-Fi, de los 400 que se esperan circulen este año. Estos buses tendrán pasajes diferenciados, una de G. 3.400 (buses con aire, pero sin conexión a internet) y la otra de G. 5.000 (Ejecutivas, con aire acondicionado y Wi-Fi).