“No está previsto dentro del proyecto. Hoy el Pytyvõ está centrado en trabajadores y comerciantes de frontera. No estamos previendo un Pytyvõ adicional. Hay que entender la lógica del Pytyvõ, que fue diseñado para trabajadores que no estaban generando recursos, no se incorporaban a la actividad laboral y entendemos que las medidas sanitarias que se van a ir implementando son transitorias y no por mucho tiempo como fue el año pasado”, dijo el ministro.
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Llamosas señaló que con base en las conversaciones con el Ministerio de Salud “creen” que no se van a dar ese tipo de medidas, por lo tanto “no será necesario ese tipo de implementación de programas. Hoy estamos apuntando a reducir el costo a estas empresas, entendiendo que esta situación sanitaria, si bien en algunos momentos les permite operar, no lo pueden hacer en un 100%, por eso las medidas adicionales apuntan más a bajarle los costos a esas empresas, de modo a que puedan seguir sosteniendo las empresas y los empleos”, sostuvo.
Prevén proyecto de ley para emergencia, unos US$ 100 millones
Indicó que desde hace algunas semanas se está trabajando en un proyecto de ley que permitirá atender este segundo año de emergencia sanitaria. “Dentro de esa ley queremos incorporar, por un lado, una serie de herramientas y autorizaciones que le permitan al Ministerio de Hacienda tener mayor flexibilidad para administrar el presupuesto aprobado, si bien a través de instrumentos como el decreto o el plan financiero tenemos cierto margen, pero hay otras cuestiones para las que necesariamente necesitamos autorizaciones legales”, señaló Llamosas.
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“El año pasado, con la ley de emergencia sanitaria, el Ministerio de Hacienda y el Poder Ejecutivo tuvieron amplias facultades de redireccionar el presupuesto, que permitió atender la emergencia. Este año vamos a necesitar una herramienta parecida”, añadió.
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“Por otro lado, también necesitamos asegurar los recursos para continuar con una serie de programas como el subsidio a los trabajadores suspendidos. También por el lado del acceso al crédito, fondear con recursos adicionales del Fogapy y tratar de ver otro tipo de instrumento financiero que permita el acceso a recursos en esta etapa tan crítica para las empresas y prever recursos para el momento de recuperación”, explicó.
“En principio, evaluamos que Fogapy necesitaría unos US$ 30 millones, IPS entre US$ 30 y 50 millones, dependerá de cómo evolucione la emergencia sanitaria, y se prevén unos US$ 100 millones en total”, indicó.
Consultado acerca de si para esto se requerirá de nuevas deudas, dijo: “En principio queremos agotar instancias de redireccionamiento y en caso de que sea necesario ir con pedido de recursos adicionales al Congreso. Dependerá de las autorizaciones que nos dé el Congreso para asegurar o no esos recursos”, alegó.
Llamosas anunció que presentarán tres proyectos de leyes: reforma del servicio civil, propuesta de ley de fortalecimiento fiscal y otro de reforma de las compras públicas, que será anunciado esta semana y enviado al Congreso.
“Las reformas son necesarias para asegurar una finanza pública saludable y, por ende, un crecimiento económico sostenido. Vamos a hacer todo lo posible para que estos proyectos sean tratados lo antes posible”, sostuvo.