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El 28 de setiembre de 2023, Antonia Arce, en representación de su pareja Lidio Dejesús Cabrera Candia (42 años) –la víctima que quedó en estado parapléjico– presentó denuncia penal en Fiscalía contra miembros del Consejo de Administración del Instituto de Previsión Social (IPS), médicos tratantes de la afección del asegurado y contra un intermediario quien conseguía los medicamentos “más barato que las farmacias”.
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La denuncia penal de presunta mala praxis médica es contra Vicente Battaglia, Miguel Ángel Doldán Martínez, Gustavo Arias, Roberto Brítez Ferreira, Ludia Silvera, Ricardo Vicente Oviedo, exintegrantes del Consejo de Administración del IPS, así como el intermediador que conseguía los medicamentos a menor costo Diego Pineda.
También denuncian a médicos cirujanos y de otras especialidades del Servicio de Terapia Intensiva de Adultos de la previsional quienes atendieron a la víctima, entre ellos el Dr. Juan Lim Ji, por la presunta mala praxis, asociación criminal, estafa y otros delitos que pudiera surgir en el transcurso de la investigación fiscal.
La fiscala de la Unidad Barrial N° 9 Abog. Carina Concepción Serón Núñez, tiene la causa de presunta mala praxis, estafa y asociación criminal.
El abogado Florencio Díaz es el patrocinante de la denuncia penal ante la Fiscalía.
Hechos denunciados en la Fiscalía
La denuncia presentada por Antonia Arce, pareja de la víctima, Lidio Dejesús Cabrera Candia, refiere que concurrió en el mes de junio de 2023 al Hospital Central del IPS a los efectos de consultar por una dolencia que según el médico se trataría de un cuadro de “hígado graso”.
Sin embargo, luego de los estudios médicos se concluyó que padecía de “Caroli” (enfermedad del hígado), por lo que le fue recomendado someterse a una operación que según el profesional médico “al día siguiente de su cirugía él ya estaría de nuevo en su casa por la poca gravedad de la patología detectada”.
Por indicación médica, Lidio Cabrera se internó en el IPS el día 19 de junio de 2023 y fue sometido a cirugía. Al día siguiente, 20 de junio de 2023, fue derivado a Terapia Intensiva del IPS donde estuvo por 1 mes y 17 días, contrariamente a lo que fue indicado inicialmente por los médicos tratantes.
La denuncia penal refiere que Lidio Cabrera estando en terapia intensiva, fue víctima de una infección hospitalaria conocida como “KPC”, lo que revelaría las pésimas condiciones sanitarias en que son mantenidas las dependencias del IPS.
Esto agravó la situación del paciente y según lo explicado por los médicos intervinientes y los responsables del área de terapia intensiva, indicaron tuvo un pico de presión alta que afectó a Lidio Cabrera, que no fue monitoreada ni cuidada en forma por los médicos y enfermeras del lugar, derivó en un ACV (accidente cerebro-vascular) que lo dejó totalmente paralizado en sus extremidades.
“Tanto la infección hospitalaria como el ACV pudieron haberse evitado si el asegurado era internado y operado en un centro hospitalario manejado con responsabilidad, honestidad y eficiencia profesional”, cuestiona la denunciante.
Agrega: “Durante toda la etapa de internación en Terapia Intensiva hemos sufrido no solo el hecho de ver que mi pareja padecía de una aguda complicación en su cuadro de salud encaminándose hacia la muerte. A esto se sumó un cuadro extorsivo de apremiante sufrimiento producido por el hecho de que los caros medicamentos que supuestamente requerían para tratar a Lidio no existían en la farmacia del IPS, por lo que había que comprarlo de afuera”.
Rosca criminal extorsionaba para vender medicamentos que serían del IPS
La denuncia penal explicar el modus operandi, la forma continua y sistemática en que procedía el médico de guardia de Terapia Intensiva, cuya identidad desconoce.
Refiere que le “pasaba un escrito en un papel común sin membrete ni firma del médico tratante en el que recetaba el medicamento que urgentemente debía comprar diciéndome siempre que “en las farmacias ese medicamento es muy caro, pero hay una persona que consigue a precio muy barato”, y acto seguido me recomendaba contactar con un señor de nombre Diego Pineda al teléfono número 0981-738-551, quien me vendía estos fármacos un poco más barato que lo ofertado en las farmacias”, refiere Arce.
La denunciante sostiene que según las informaciones que recibió el propio hospital, estos medicamentos serían del IPS y los mismos fueron sacados de la farmacia para su comercialización y beneficio de estas personas que conformaban una verdadera asociación criminal. Agregó prueba junto a su denuncia de cómo recetaban los médicos los medicamentos que luego proveía Diego Pineda.
Transferencia de sumas millonaria al tal Pineda
La pareja de la víctima de presunta mala praxis explica que como carecía de recursos económicos tuvo que recurrir a la firma empleadora de Lidio Cabrera, denominada Mi Retiro SA, cuyos representantes realizaron diversas transferencias a la Cuenta Nº 0000000720710157 del Banco Itaú, a nombre de Diego Pineda, la suma total de G. 42.890.000, para la compra de medicamentos.
Aparte de este monto, entre otros gastos los médicos le hicieron comprar medicina por G. 18.870.000, y adjunta los comprobantes de transferencias y el listado de medicamentos comprados.
En estado cuadripléjico
Además de gastar la millonaria suma señalada en un seguro que por su propia ley debía proveer medicamentos de forma gratuita, hoy tienen el peor escenario porque el asegurado Lidio Dejesús Cabrera Candia está postrado en una cama, en estado cuadripléjico, sin movilidad propia, alimentándose por sonda, por tanto sin posibilidad de trabajar para sostener a su familia.
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Pagó por un turno y en el registro le tienen como fallecido
Además de las irregularidades señaladas en la denuncia ante el Ministerio Público, refiere que en el Hospital Central del IPS se negaron a cargarle su reposo médico por lo que hasta hoy no ha cobrado ni un solo guaraní en este concepto, obligándoles a la víctima y a su familia a vivir de la caridad pública.
De igual manera, otro hecho sumamente irregular constituyó el hecho de que al concurrir al IPS de Capiatá para agendar una cita con el médico, la pareja de la víctima de presunta mala praxis se vio obligada a pagar la suma de G. 100.000 para conseguir un turno.
“Pero más grave aún resulta el hecho de que Lidio Dejesús Cabrera Candia figura en los registros del IPS como fallecido, lo cual me obliga ahora a tener que recurrir a la sede central para aclarar que el asegurado sigue con vida. Adjunto como prueba una captura de pantalla en la que se observa que el asegurado aparece como fallecido”, refirió Antonia Arce.
Descripción de los delitos denunciados
La denuncia penal presentada ante el Ministerio Público señala que las autoridades del Instituto de Previsión Social, desde el Consejo de Administración, entiéndase las personas denunciadas así como los médicos, enfermeras y técnicos que prestan servicios en la Sección de Terapia Intensiva para Adultos, son autores y partícipes por acción y otros por omisión del delito de estafa porque engañan al trabajador y a la patronal prometiendo un servicio médico eficiente y gratuito y la realidad muestra todo lo contrario.
Agregan que estas personas se asocian ilícitamente para despojar de su dinero al asegurado que se encuentra angustiado por la posibilidad de que su pariente o familiar pierda la vida y cae en los tentáculos de este grupo de persona que se benefician económicamente del sufrimiento del asegurado y sus familiares.
Los médicos utilizan un método extorsivo diciendo al familiar del paciente que si no se le provee ese medicamento, ellos ya no podrán salvarle la vida, por lo que estos familiares se lanzan a una desesperada búsqueda de recursos endeudándose o dejando en prenda lo poco que tienen, concluye la denuncia.