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Hay 27 colorados cómplices de impresentables buscando rekutu en estas Elecciones Generales. La Cámara de Diputados, gracias a los colorados y algunos “satélites”, principalmente carto-llanistas, se ha constituido en un paredón de defensa de cuestionados actores políticos, como la ex fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez, el exministro de la Corte Antonio Fretes y el exgobernador de Central (ahora procesado), Hugo Javier González (ANR, HC).
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Sobre todo la bancada de Honor Colorado, que responde al declarado por Estados Unidos como “significativamente corrupto” Horacio Cartes, ha sido “disciplinada” en frenar cada intento de enjuiciar a sus cuestionados aliados.
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Es cuando menos contradictorio que precisamente son los colorados los que prometen que “vamos a estar mejor”, cuando su conducta política en Cámara Baja se caracterizó justamente por defender a sospechados de “manotear” fondos públicos en plena pandemia, como es el caso de Hugo Javier González, o de presuntamente defender a intereses particulares de Cartes y no de la ciudadanía en el caso de la ex fiscala general Sandra Quiñónez.
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En las máquinas de votación también saldrán nombres de 10 colorados oficialistas, a quienes si bien hay que reconocerles que en general se mantuvieron firmes para tratar de enjuiciar a Quiñónez, en los casos de Fretes y el “Nº 2″ fueron cómplices.
En el caso del exministro de la Corte, de extracción colorada, Antonio Fretes, ni siquiera tuvieron en cuenta las denuncias sobre supuesto pago de sobornos relacionados al caso Kassem Mohamad Hijazi, su sospechosa fortuna familiar o la crisis institucional en la Corte Suprema de Justicia.
Algunos incluso buscan premio doble
Pese a apañar a estos y otros varios cuestionados personajes, varios diputados buscan incluso ascender el próximo periodo.
Es el caso del diputado Pedro Alliana (ANR, HC), que aspira nada más y nada menos que la vicepresidencia de la República junto a Santiago Peña.
Para el Senado también aspiran varios reprochables personajes, como el caso de Erico Galeano (ANR, HC), denunciado por su propio correligionario Derlis Osorio (ANR, oficialista) por presunto vínculo con uno de los prófugos por “A Ultranza”, Sebastián Marcet.
También Basilio “Bachi” Núñez (ANR, HC), que conforma un clan familiar en Presidente Hayes, cuyo hermano Óscar “Ñoño” Núñez está procesado por presunto daño patrimonial cuando era gobernador.
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Núñez también ameritó ser investigado por recibir millonarios préstamos sin respaldo aparente, de la cooperativa administrada por el procesado por “A Ultranza PY”, el exdiputado Juan Carlos Ozorio (ANR).
También hay premiados “directos” como Juan Carlos “Nano” Galaverna y Guadalupe Aveiro, que se ubicaron como suplentes en la lista al Senado.
Una nueva prueba con Bogarín A.
La lista de cuestionados salvados por los colorados es realmente amplia, en incluso en el recuento se podría incluir las veces que salvaron al vicepresidente Hugo Velázquez (declarado “significativamente corrupto” por EE.UU.) y al presidente Mario Abdo Benítez, sin embargo, la próxima prueba será el pedido de juicio político a Jorge Bogarín Alfonso (ANR, HC).
Mañana en Cámara de Diputados se deberá tratar -si hay quorum- el libelo acusatorio contra el miembro del Consejo de la Magistratura (CM), también sancionado por Estados Unidos. Pese a un robusto libelo con cuatro causales fundamentadas, los colorados dejaron entrever que salvarían a Bogarín Alfonso, a juzgar que colorados votaron el dictamen de rechazo en la comisión de Asuntos Constitucionales.
Liberales también tienen reprochables
Si bien el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) mayormente en las internas “pasó factura” a sus diputados que estaban más ligados al cartismo, algunos lograron colarse en las listas para estas generales.
El caso más evidente es el del polémico diputado y aspirante al Senado Édgar Ortiz (PLRA, llanista), que sistemáticamente defendió a Quiñónez del juicio político y votó junto a los cartistas en varios proyectos sensibles para HC.
También tuvo votos cuestionados el diputado (que pretende el rekutu), Andrés Rojas Feris (PLRA, dionisista), que en la primera votación llegó a votar en blanco y fue uno de los que dio quorum para el archivamiento en su momento del juicio a la exfiscala.
En las listas del PLRA también aparecen varios que tuvieron como única “mancha” el juicio realizado a Quiñónez el 8 de agosto del año pasado, que fue cuando más cerca estuvieron de lograr la mayoría absoluta, y donde se les reprocha haber dado quorum y salvarla.
Es el caso de Emilio Pavón, Ariel Villagra, Rodrigo Blanco, Roya Torres, Pastor Vera Bejarano y Sergio Rojas, todos ellos aspirantes al rekutu, salvo el último, que apunta al Senado.
En el caso de Pastor Vera Bejarano (diputado por San Pedro) incluso ha hecho méritos para ser redimido, puesto que hay que reconocerle ser el articulador para lograr la renuncia (antes de ser echado por sospechas de corrupción) del exintendente de San Pedro del Ycuamandyyú Gustavo Rodríguez (ANR, HC).
El diputado sampedrano también es el redactor del libelo acusatorio contra Jorge Bogarín Alfonso, donde junto a otros colegas han documentado cuatro casos de presunto mal desempeño para sustentar el pedido de juicio político contra el miembro del Consejo de la Magistratura.
Es de destacar que los liberales en las pasadas internas de diciembre les retiraron la confianza y la posibilidad de aspirar a nuevos cargos electivos a otros cuestionados diputados, como es el caso de Enrique Mineur (PLRA, llanista) y la diputada María de las Nieve López (PLRA, llanista). Ambos legisladores siempre votaron más cerca de HC que de la oposición.