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Los técnicos del MEF señalaron a ABC que una vez que el Ejecutivo emita el decreto de autorización, iniciarán las gestiones con las autoridades del BCP para obtener el adelanto de corto plazo.
Explicaron que aún están trabajando en el monto final que requerirá el Tesoro para cumplir con las obligaciones pendientes de pago, pero aseguraron que el pedido a la banca matriz no pasará de los US$ 300 millones.
Los técnicos indicaron que, incluso, podría ser menor el monto porque la recaudación tributaria en los primeros días del presente mes está muy bien y no se quiere incurrir en costos innecesarios para el Tesoro Público.
En los últimos dos años, precisamente, el Tesoro dejó solicitar adelantos porque la banca matriz pretendía cobrar una tasa de interés muy elevada por el dinero.
Ley autoriza hasta el 10%
La Ley N° 489/1995, orgánica del BCP, en su artículo 58, modificado por la Ley N° 6104/2018, autoriza a la entidad a conceder al gobierno adelantos de corto plazo de los recursos tributarios presupuestados para el año respectivo, a fin de financiar el gasto público.
La referida normativa establece que el adelanto no podrá exceder del 10% de los ingresos tributarios presupuestados, lo que este año equivale a poco más de G. 3,4 billones (US$ 467,9 millones).
El fisco tiene plazo hasta el 31 de diciembre del presente ejercicio para devolver los recursos y a la vez, pagar la tasa de interés que el directorio del BCP fijará para realizar la operación.
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Los fondos servirán para financiar parte de la deuda flotante o pendiente de pago correspondiente al ejercicio 2023 y los gastos prioritarios.
La cartera de Economía había estimado que la deuda flotante con proveedores de bienes y servicios rondaría los US$ 250 millones, lo que ya empezó a abonar desde la semana pasada y cuyo plazo legal máximo establecido para cumplir vence a fines de febrero.
La deuda flotante, por ejemplo, incluye pagos a proveedores por inversiones en obras, servicios básicos, bienes de consumo, insumos y otros gastos.
Colocación de bonos soberanos
A la par de gestionar el adelanto de corto plazo ante el BCP, las autoridades del MEF también están preparando la colocación de bonos soberanos en el mercado internacional.
El Tesoro generalmente emite los bonos a fines de enero y principio de febrero, por lo que están evaluando las condiciones del mercado para elegir el mejor momento, según los técnicos.
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La cartera tiene autorización para emitir por hasta US$ 600 millones para pagar las deudas con constructoras y farmacéuticas, de los cuales en diciembre del año pasado ya colocó en el mercado local el equivalente a US$ 220 millones.
A esto se suma otros US$ 532,5 millones que en su mayor parte iría a inversiones, más los bonos que están autorizado por ley administración de pasivos o “bicicleteo” para cumplir con los vencimientos de deuda.