San Lorenzo continúa con el eterno problema de baches, cañerías rotas y mucha suciedad

La comuna este año debe recibir la suma de G. 11.720 millones en concepto de royalties. En el ejercicio 2022 recibió G. 17.000 millones en concepto de royalties, pero aun así para cumplir con el pago a funcionarios se tuvo que recurrir a un millonario préstamo de G. 12.000 millones, en noviembre de 2021.

El mismo monto fue nuevamente solicitado en noviembre del año pasado, a pesar de que la recaudación de Felipe Salomón (ANR) haya sido de G. 5.000 millones.

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Pese a que el año pasado el Ministerio de Hacienda transfirió en concepto de royalties, Fonacide y juegos un total de G. 21.838 millones, la ciudad antes de ser un ejemplo para muchas otras en cuanto a aseo y progreso, es ejemplo de todo lo contrario.

Si bien actualmente se encuentran en ejecución varios proyectos como la construcción de bicisendas en la calle Victorio Curiel, construcción de paseos centrales con lumínicas, la ciudad necesita de mayor inversión.

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Urge el arreglo de calles que se encuentran destrozadas. En zona del microcentro, incluso, con demoras de dos meses, como ocurre actualmente en la calle Saturio Ríos.

Los carteles de desvío de la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap) esparcidos junto a restos de cañerías, y arena lavada, muestran a una ciudad sucia y descuidada.

Pero este problema no es el único. La misma situación se ve en la Avda. del Agrónomo y Mcal. José Félix Estigarribia, arteria concurrida por ser la vía principal para dirigirse hacia la ciudad de Asunción por Eusebio Ayala.

A pocas cuadras del lugar, pero dentro del microcentro de la ciudad, sobre la calle Takeda entre Coronel Bogado y San Lorenzo, un enorme buraco quedó abierto tras el paso de la Essap con señalizaciones de cuidado.

Pero el desorden no termina allí, por citar ejemplos las plazas públicas están en total descuido. Un solo ejemplo es la Plaza de Aguas, ubicada en el barrio San Francisco; en el lugar se encuentra una enorme pileta que solo cría mosquitos.

A esto se suman otros problemas, las señalizaciones que están rotas como también semáforos que solo están de adorno, en las calles Victorio Curiel y Concordia.

La pésima situación, mencionada en los anteriores casos, es responsabilidad de la comuna sanlorenzana, que hasta la fecha no cuenta con ninguna cuadrilla que salga a la calle a realizar relevamiento de datos acerca del estado en el que se encuentran estos puntos.

La falta de empedrados también es otra de las deficiencias del municipio, que si bien se encuentra en ejecución un paquete de más de 400 cuadras desde el año pasado, el avance ha sido escaso dejando a varios barrios todavía en la espera de accesos viales confortables.

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Recientemente unos vecinos del barrio Villa Laurelty denunciaron la inacción de las autoridades ante el cúmulo desmedido de basura debajo de la unos cables de alta tensión de la ANDE, que cruza el barrio, problema que hasta la fecha no tiene solución.

El intendente, Felipe Salomón, dice que la mayor parte de los problemas de vialidad es de la Essap, debido al deterioro de cañerías viejas que tienen pérdidas y que perforan el asfalto.

Fue consultado sobre los problemas existentes, y respondió que, “se tiene planeada la ejecución de varios proyectos para mejorar la ciudad, pero estamos esperando el aporte de la Entidad Binacional Yacyretá. Queremos hacer una nueva ciclovía, como también otros proyectos con la Essap para el cambio de 200 cañerías, que solucionarían los problemas de los baches”, explicó Salomón.

Sin embargo, no dio detalles en qué se ha empleado la suma de lo recibido en concepto de Royalties del año 2021 y 2022, como tampoco especificó otros proyectos que busquen mejorar la vista de la ciudad por lo menos en el microcentro de la localidad.