Niño grave por agresión en colegio: la institución quiso minimizar la situación, según abogado

El abogado de la familia de un niño que sufrió una grave lesión en el cráneo, supuestamente a causa de una patada propinada por un compañero de colegio, dijo que la institución intentó minimizar lo ocurrido y que la tardanza de las autoridades en dar aviso a los padres para el traslado a un hospital causó que su estado de salud se agrave. Agregó que si el presunto agresor tiene 14 años podrá ser imputado por lesión grave.

El niño agredido está hospitalizado en el Centro Médico La Costa, en Asunción, donde permanece en coma inducido.
El niño agredido está hospitalizado en el Centro Médico La Costa, en Asunción, donde permanece en coma inducido.

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En comunicación con ABC Cardinal este jueves, el abogado Venancio Domínguez dio detalles sobre el caso de un niño de 12 años que fue agredido en su colegio, una conocida institución educativa de Asunción, y sufrió una grave lesión en la cabeza.

El paciente permanece en coma inducido luego de una compleja cirugía que le fue practicada ayer en el Centro Médico La Costa, donde se constató que una patada que recibió en la cabeza, presuntamente por parte de otro alumno de un curso superior, le ocasionó una lesión craneoencefálica con sangrado interno.

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La supuesta agresión ocurrió el miércoles en horas de la mañana en el patio del colegio, donde el niño fue abordado por alumnos mayores, uno de los cuales supuestamente lo tiró al piso y le propinó la patada en la cabeza, dejándolo inconsciente.

Según declaraciones de la madre, quien a su vez se basó en información brindada por sus otros dos hijos, también alumnos del colegio, los profesores de la institución presuntamente intentaron reanimar al menor desvanecido, dejando pasar aproximadamente una hora y media antes de comunicar la situación a los padres, quienes llegaron luego y lo encontraron “prácticamente convulsionando”.

El menor fue trasladado por sus padres al Instituto Privado del Niño, desde donde fue derivado a La Costa.

Posibles secuelas

La naturaleza de la lesión implica la posibilidad de secuelas a largo plazo y “el neurólogo dice que solo el tiempo va a decir cuáles son las secuelas una vez que el niño despierte”, comentó el abogado.

Asimismo, indicó que la actuación de las autoridades del colegio al no gestionar el traslado inmediato a un centro asistencial podría considerarse omisión de auxilio y que el presunto agresor –que fue identificado por otros alumnos– podría ser imputado por lesión grave si ya tiene 14 años de edad.

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El nombre de la institución donde ocurrió el incidente no se ha hecho público.

El abogado se limitó a decir que es un colegio “caro” y “prestigioso” y que en instituciones de ese tipo generalmente los actos de “bullying” son “minimizados” y los padres a menudo no se atreven a denunciarlos por “temor a que su hijo no sea aceptado el próximo año”.

“En todo momento minimizaron”

Afirmó que, según dijeron los padres del niño afectado, las autoridades del colegio “en todo momento minimizaron” la situación, pintando el incidente como una lesión accidental, y no quisieron revelarles el nombre del supuesto agresor.

“El colegio sabía que fue una lesión propinada por otro alumno, lo que no quisieron es brindar datos a la madre”, comentó. “Quisieron decir que la lesión ocurrió jugando”, acotó.

Agregó que, según el neurólogo que atendió al niño tras su hospitalización, la cirugía pudo haberse evitado si era derivado rápidamente a un centro de salud, pero el lapso que pasó entre la lesión y su traslado agravó la situación.

“Le asistieron de forma improvisada a la criatura; creyeron que solo fue un golpe y la criatura podía volver en sí”, dijo.

Pedirán que intervenga la Fiscalía

El abogado resaltó también el perjuicio económico que la situación causa a la familia del niño hospitalizado, cuyos gastos médicos supuestamente podrían ascender a alrededor de 250 millones de guaraníes.

“(El colegio) debería costear la totalidad de los gastos”, opinó.

Finalmente, comentó que la familia del menor afectado presentará denuncia ante el Ministerio Público y solicitaría que la Fiscalía se constituya en el colegio para tomar datos de las personas que puedan tener conocimiento del incidente y recolectar imágenes de cámaras de seguridad de la institución para “tener la verdad exacta de lo ocurrido”.

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