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La iniciativa para tratar el juicio político al designado “significativamente corrupto”, según EE.UU., Jorge Bogarín Alfonso (ANR, cartista), está en el punto 21 del orden del día de la sesión de Diputados. Si bien se puede adelantar mediante un pedido de preferencia, es muy difícil que lo hagan para castigarlo, sí para salvarlo.
En Diputados, que tiene mayoría colorada, hay escaso interés en acelerar el tratamiento del pedido de juicio político contra el miembro del Consejo de la Magistratura.
El tema viene siendo postergado desde el pasado 24 de abril.
En el caso de que se adelante el tratamiento, sería para el archivamiento porque los 43 diputados colorados (de un total de 80 miembros) optaron por reflotar la “Operación Cicatriz” y eso incluye también salvar al cartista Bogarín Alfonso para que permanezca como representante de los abogados ante el Consejo de la Magistratura.
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Sin embargo, el libelo acusatorio detalla cuatro graves causales de juicio político: Prevaricato, enriquecimiento sin causa y declaración jurada falsa y cobro indebido de honorarios.
Los colorados (cartistas y oficialistas) son 43 diputados, y para que prospere el juicio político se requiere mayoría absoluta, que son 53 votos en caso de que estén los 80 presentes.
Causales contra Jorge Bogarín Alfonso
Entre las causales presentadas por un grupo de diputados de la oposición se detalla una truculenta trama de presunta persecución al ahora difunto exfiscal Jorge López Lohman, articulada por Bogarín A. cuando era miembro del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) para defender a su “amigo”, el actuario judicial Vicente Ferreira Rodríguez.
Hoy los colorados pretenderían aplicar la misma fórmula que cuando salvaron al exministro de Corte, Antonio Fretes.